martes, 28 de julio de 2009

La imagen nuestra de cada día


Sábado a la noche. Reunión con amigas de trabajo en casa. Conversaciones amalgadísimas, risas, llantos, fotos, cerveza, vino, un pollito encantador (modestia aparte). Variado.
Y entre toda esa soltura, esa desmesura exquisita -merecida!-, una le dice a la otra algo mas o menos así: -vos antes te arreglabas, por qué no lo hacés más? Con lo lindas que te quedan las polleras!
Y la otra, que venía de caminos cansados, con la autoestima un poco por el subsuelo lo pensó, lo asimiló, y recordó que le gusta gustarse, de adentro para afuera, y viceversa. Y acometió, como suele hacer.

Pero entonces vino el hondazo: “por qué tan corta esa pollerita”?


Para algunos, la línea que separa lo que queda bien del ridículo es más que delgada.

A mi siempre me quedará mi pollera, que de una bofetada me recordó que no necesito
sentirme observada para saber que estoy ahí, querida y respetada (y mirada
también, por qué no?)

Pero como buena tana que soy, la verán volver (tal vez algo más larga para no alterar a los que barajan) Porque la imagen nuestra de cada día no Se agota en el qué, sino en el cómo.

Eso sí, entre mi bronca y placer, fue el tema del día.

domingo, 26 de julio de 2009

Para mi, claramente

Piletas vacías de entrada que paradójicamente dieron fuerza para acometer (así somos
la mayoría de los humanos)
Y de ahí para adelante, naufragando.
De ahí para adelante armando coraza, la cual se despedaza cada tanto ante hechos fugaces.
Qué es lo que tienen ciertos impulsos, que realmente no permiten límites?
Y pasan los días, los meses y con ellos crece un pseudo masoquismo, con ellos se entretejen conjeturas, con ellos se desvanece el creer.
De que se jactan los que dicen tener todo bajo control? si históricamente los motores son
los diversos sentimientos los que en un segundo pueden descontrolar todo. No sabemos vivir el presente porque no podemos despojarnos de determinados imaginarios, de proyecciones, del pasado que pensamos para el futuro.
Cómo no oscilar alrededor de castillos de arena si uno mismo suele no tener en claro cómo y dónde oscilar?
Ansiamos seguridad y confianza cuando no somos capaces de de darlo.
Ansiamos libertad para refugiarnos, para no hacernos cargo de que de muchas cosas hay que
hacerse cargo, sobre todo de la verdad (siempre tan hermosamente relativa)

Así son las cosas, no nacimos para recibir todo dado y porque sí.

Y nos aferramos vaya a saber a qué... porque en definitiva de algo hay que agarrarse.

Cuando cuesta ver el sol, no siempre significa que afuera está nublado.
Cuando cuesta entender, no siempre significa que haya algo para comprender, las
cosas suceden, sin más. El problema es que nunca se está lo suficientemente preparado,
el problema es que la mayoría de las veces nos resulta casi imposible darnos cuenta de que
lo único que tenemos, es el presente. Lo tomamos o lo dejamos, con lo que implique. De eso se trata vivir, de seguir viviendo.
Ya no trataré de explicar y entender todo, me lo prometo. No quiero pasar una vida de
lamentaciones filosóficas, tampoco dejar de indagar a la vida, claro.
Supongo que me re-invento positivamente desde hoy y vuelvo a estar a mano conmigo misma.


Gabb

Para vos, claramente



Gracias a haber luchado por vos hasta cansarme, me enseñaste a ver que puedo no bajar los brazos aún vencida. Me enseñaste que es mentira la verdad, y viceversa, por eso es relativa. Esa ambigüedad es la que caracterizó la “relación” que tuvimos.
Me enseñaste a presentir que el que calla otorga, que el que ríe muchas veces está gritando y uno no es el salvamento adecuado. Me dejaste creer que brillaba a tu lado, y fue grandioso porque descubro cuánto más podré brillar aún, primero sola, como debe ser.
Me dejás sabor amargo encarnado en silencios, en miradas perdidas, en doble vida. Gracias, porque demuestra que en la adversidad no sos hombre de una sola mujer y eso es lo que ninguna mujer quiere. Gracias porque me fortalecés casi al extremo, sin saberlo, a pesar de admitir que trabajo para olvidarte.
Gracias porque de alguna manera te dejaste querer, y queriéndote me sentí plena, me sentí viva; pero sin dudas veo que puedo estar más viva sin este teatro multifunción no malintencionado... te pintó así y a mi también, que le vamo´a hacer. Uno no siempre elige como evadir un rato la realidad que lo lastima, esa que llamás engañosa.
Gracias a este dolor veo claramente que lo que prevalece una y mil veces es la fidelidad a uno mismo, y ese es el camino que pretendo transitar.
Y se van acabando esta fantochada y tu ambivalencia que conducirían inevitablemente hacia el hastío… no quiero migajas. Yo te quería a vos pero a vos si te complacen de alguna manera otras migajas.
A pesar de todo y de mi desnudo resentimiento revestido de sinceridad brutal, te quiero. Eso no cambia. Por lo tanto –porque quererte lo demanda- espero que salgas de esa pobreza espiritual que alimentás una o dos veces al mes o cada dos. Y ojalá salgas pronto, antes de que vuelva a derribarte, y vivas siempre derribado....
Y disculpá mis métodos, pero el escupir verdades cara a cara nunca fue lo nuestro. Vos elegís los mensajes y yo elijo este blog.
Supongo que estamos a mano.
Que tengas una vida interesante. 

GABB